Carlota Fominaya me pidió opinión sobre los regalos a los profesores. Aquí puede leerse el reportaje completo.
"El hecho de que hayamos perdido cien veces antes de empezar no es motivo para que no intentemos vencer". Atticus Finch.
"El hecho de que hayamos perdido cien veces antes de empezar no es motivo para que no intentemos vencer". Atticus Finch.
Cuando tenía treinta o treinta y dos añitos, hice un curso de inglés en el Instituto Británico. Al acabar, a alguien se le ocurrió comprar unas flores para la profesora y yo puse el dinero que se me pedía, aunque no me había parecido una mujer especialmente simpática. Un par de días antes de ir a dárselo, presencié una conversación en la que una compañera que se había sentido maltratada por ella (me di cuenta entonces de que efectivamente había sido así) explicaba a otros por qué no iba a contribuir en el regalo y me acabé de convencer de que no había sido una buena idea. Y esto, entre adultos y de muy alto nivel formativo.
ResponderEliminarA finales de los años 70, ya se daba la costumbre del regalo al maestro como afortunadamente extinta o en vías de extinción, porque era símbolo de muchas cosas negativas: de los tiempos de salarios de hambre, de ocasionales coacciones veladas..., así que incluso llegó a estar mal visto, como una práctica arcaizante. Podría poner aquí unos cuantos ejemplos (algunos, personales) de regalos o de favores de padres a profesores que acabaron con muy mal sabor cuando el profesor se vio ante la obligación profesional (fortísima obligación) de poner un suspenso.
Creo que no es muy difícil de entender: ni hay necesidad de hacer regalos ni de tomarlos, y es de una sensatez elemental que no deberían circular entre calificados y calificadores. Eso, sin hablar de las tensiones y malentendidos como la de mi primer ejemplo que pueden generarse. No soy en absoluto partidario de los regalos a los profesores y es sintomático que su resurrección haya llegado por conducto del wasapeo, deporte que ha aportado a la vida escolar actual más de una novedad odiosa.
Algún día tenemos que hablar sobre el wasapeo, Pablo... Un abrazo.
EliminarAlberto, tú ya sabes que yo contigo, si hace falta, hablo hasta de termodinámica, así que, de este tema del wasapeo escolar, del que sí que podría hablar con conocimiento... Seguro que sacaremos conclusiones interesantes el día que nos decidamos, o, mejor aún, que tengamos la ocasión de hacerlo con unas cañas como insobornables testigos. Un abrazo.
EliminarCon unas cañas siempre es mucho mejor. Un abrazo.
Eliminar¿Serán este caballo de Troya y otros de su yeguada los que han resucitado la momificada costumbre de hacerle regalos al "profe"?:
ResponderEliminarhttps://www.mrwonderfulshop.es/es/regalos-para-profesores.html?wt_ga=70726730596_350632469261&wt_gk=b_70726730596_&gclid=CjwKCAjwr8zoBRA0EiwANmvpYFIh28SxQ4_VmK-KtyaXjSa6aH20P6UcP2gDdmx09VJuVZp94vxXURoCoZQQAvD_BwE
Tranquilamente...
Eliminar