miércoles, 17 de enero de 2018

Telemática realidad. En El Mundo.


Internet ha pulverizado el tiempo. Desbocados, acelerados, con la información convertida en mercancía sumamente perecedera, estamos afectados de un doble mal: la fugacidad y la futilidad. La fugacidad impide detenernos, y sólo si nos detenemos podremos estudiar lo suficiente como para extraer, con criterio, lo verdadero de lo falso. Por su parte, la futilidad es consecuencia lógica de lo realizado con prisa y sin esfuerzo, a simple golpe de click. Mucho de lo que aparece en las redes sociales es puro humo que pronto se disipa porque no sirve, no construye, no crea y mejora. Sólo aquello que es verdaderamente útil resiste al paso del tiempo, permanece, de ahí que esta realidad vivida en instantes sea cada vez menos sólida y más gaseosa -ni siquiera ya líquida- como nos recuerda Alberto Royo en su último ensayo.

Así comienza la tribuna, publicada hace pocos días en El Mundo, de Alfonso Pinilla García, profesor de Historia Contemporánea de la Universidad de Extremadura.

El artículo completo puede leerse aquí.

2 comentarios:

  1. Buenas tardes,

    El enlace no aparece en la publicación del blog.

    Gracias por seguir con el blog. Te leía en el "feisbuk", pero me he "desenganchado" de las redes sociales.
    Ahora más que nunca soy más partidario de los blogs que de las redes sociales. La información está abierta para todo el mundo y no restringida a los usuarios de la aplicación que gana dinero con nuestra privacidad.

    Nos leemos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias por el aviso. Espero haberlo corregido.

      Un saludo.

      Eliminar