Alicia Delibes recomienda en Libertad digital diez libros para una mejor comprensión de la crisis de la enseñanza. Para mí es un auténtico honor figurar en ese listado junto a autores como Hannah Arendt, George Steiner, Inger Enkvist, Antonio Gramsci o la propia Alicia Delibes, con quien coincido en no pocos planteamietos, aunque discrepe también en otros. Para escuchar la valoración de cada uno de ellos, dejo el enlace a la entrevista para el programa LD Libros, aquí. Comenta sobre Contra la nueva educación (más o menos a partir del minituo 22) que es una "vomitona antipedagógica fantástica" que "no deja títere con cabeza". Considera que tengo "muchísima razón" en muchas cosas, aunque no termina de compartir mis desavenencias con el economista Juan Ramón Rallo y duda de la sinceridad de mi alegato en favor de los servicios públicos pues, según explica, es frecuente que después de una crítica dura contra la educación pública se rompa una lanza en favor de esta para evitar represalias. No es el caso, debo decir, pues los vapuleos recibidos por parte del star system neopedagocrático no han condicionado nunca mi opinión y también porque mi defensa de lo público es totalmente sincera: porque creo en la enseñanza pública critico la enseñanza pública y, al contrario de lo que opinan personas como el mencionado Rallo, creo que es necesario reanimar al paciente y no finiquitarlo. Tengo que protestar por otra cuestión: señora Delibes, no nací en el 71 sino en el 73. No me ponga usted años, que a partir de los cuarenta uno está más sensible con estas cosas...
Por lo demás, gracias por recomendar el libro y por situarlo entre las obras de tan insignes autores.
Alicia Delibes es una de las campeonas de la lucha contra la enseñanza pública. Durante sus años de dirigente de la cosa, en lugar de cuidar de su buen funcionamiento, se dedicó a hacer lo posible para desmontarla más aún de lo que ya estaba. Qué quieres que te diga, me parece una mala compañía, Alberto.
ResponderEliminarBueno, Salustiano, lo cierto es que no es ni buena ni mala compañía porque no es siquiera una compañía, ya que no tengo el gusto de conocer a Alicia Delibes. La escuché en una conferencia hace ya unos cuantos años en la que dijo cosas interesantes, pero también hizo una defensa cerrada de la educación concertada que desde luego no comparto. Sin embargo, he leído opiniones suyas con las que sí coincido, como ya he dicho en esta entrada. Su gestión política no la puedo valorar desde la distancia. Y tampoco estoy cerca de ella ideológicamente hablando, pero eso no quita para que me sienta honrado al ser citado junto a nombres a los que respeto tanto. Un abrazo.
EliminarComparto tus criterios, amigo, como sabes. Lo de la "mala compañía" era un punto irónico. Por eso te decía que había que construir "la alternativa" de manera que no nos confundieran, es decir, que no pudiera ser atacada desde la (pseudo)izquierda educativo con algún apelativo "gracioso" (como el de "franquista" que le destinan a la idea misma de las pruebas externas. Encantado de charlar contigo por este canal. Un abrazo.
EliminarLo mismo digo. Gracias por comentar aquí, pues aprendo mucho de tus intervenciones. Un abrazo.
Eliminar