Una vez digerida la experiencia de
escuchar de viva voz a Sebastián Barajas vender su learningbydoing y a María
Acaso su redevolution, y ya recuperado del impacto, me dispongo a reflejar por
escrito, con algo más de serenidad, algunas de mis sensaciones tras el debate.
Fueron tantos los disparates escuchados que
uno no sabía si intentar rebatirlos todos, escoger algunos o directamente
manifestar el desacuerdo con el 100% de lo que se estaba diciendo para evitar
darse cabezazos contra la pared y no llegar a ninguna conclusión. Tanta
palabrería me transportó a una especie de limbo pedagógico y ganas no me
faltaron de levantarme y salir corriendo. Pero uno reivindica la persuasión y
el debate racional y debe ser consecuente, aunque la situación no era propicia
para el intercambio de propuestas sensatas sino más bien para el intento de
defensa del oficio de enseñar ante agresiones new-age y marypoppinsianas. Eso
sí, que nadie piense que había en el discurso de María y Sebastián nada
novedoso sino los tópicos de siempre en los mundos de Yupi: la culpa es del
profesor porque no está formado pedagógicamente, no se puede enseñar como hace
treinta años, la memoria no sirve para nada, el profesor debe ser un colega del
Ruben y la Jesi, el Ruben y la Jesi saben más que el profesor porque el
conocimiento lo tienen en el internete… en fin, lo de siempre pero viniendo de
un lado y el otro de la mesa y sin solución de continuidad en un frenesí de
delirio y fantasía. ¡Más madera!, que diría Groucho. Y yo, aguantando el
chaparrón y tratando de hilvanar un discurso sensato superando una atmósfera
entre el surrealismo y la claustrofobia que habría firmado el mismísimo Roman
Polanski. No creo que lo consiguiera (mea culpa), así que aprovecharé este
ambiente más distendido para explicarme como me habría gustado hacerlo ayer.
Voy a centrarme en la Sr Acaso (no es
manía, de verdad) porque encuentro más peligrosas sus pseudoteorías que las de
Sebastián Barajas quien, al fin y al cabo, pretende básicamente captar clientes
para su universidad privada dirigida a licenciados en paro (la propia página de
su empresa establece el objetivo de “aprender las habilidades prácticas que necesitas para
obtener un puesto de trabajo”. “Trabajarás”, se anuncia en la web, con
profesionales expertos en la vida real”). Acaso también tiene un libro que
vender, es cierto, pero su intención de “transformar el sistema educativo”
inquieta un poco más por basarse en unas ideas que pensaba llamar tóxicas hasta
que me he dado cuenta de que María se me había adelantado con la creación de un
término denominado “pedagogía tóxica”. Y hete aquí que debo ser uno de sus
defensores. Tuiteaba María Acaso, nada más finalizar el debate: “Me doy
cuenta de que cada vez son menos los defensores de la pedagogía tóxica”. María
define así la pedagogía tóxica”: “el modelo educativo que tiene objetivo
infundir en los estudiantes una sustancia que ocasiona la muerte del
pensamiento propio y autogenerado” (tampoco la tomemos demasiado en serio
porque la misma autora define la pedagogía como ciencia). Esta toxicidad,
deduzco, la aprecia María en lo que ella misma llama “los conocimientos
importados”. ¿Qué se puede esperar de quien considera que los contenidos no sirven para nada? En fin, como no tengo interés en leerme su libro, me voy a quedar solo
con una de sus frases “aclaratorias”, correspondiente a una de las entrevistas
que forman parte de su actual gira promocional.
“Cada
uno”, dice María, “elabora un contenido en función de su inconsciente, su
biografía y su contexto” (…) “Tenemos que admitir que cada uno (cada alumno) va
a elaborar según su propia biografía, su creatividad, sus conocimientos...un
discurso diferente”.
Siempre he pensado, aunque puedo estar equivocado, que
los contenidos no son interpretables: no lo es el Teorema de Pitágoras y no lo
es, por acudir a un ejemplo del que ayer intenté hablar sin demasiado éxito, la
forma sonata. La forma sonata tiene un esquema concreto: exposición, desarrollo
y reexposición. No es difícil, puede memorizarse en unos diez segundos y es
sencillo de comprender, pues responde al esquema del teatro clásico:
planteamiento, nudo y desenlace solo que en lugar de personajes nos encontramos
con temas musicales y en lugar de trama con la elaboración del material musical.
Pues bien, si un alumno quiere interpretar que la forma sonata tiene cinco
partes y llamarlas allemande, courante, aria y giga, obviamente, puede hacerlo.
Pero estará equivocado porque estará citando danzas de la suite barroca. Si su
“inconsciente”, su “biografía” o su “contexto” le llevan a afirmar que el
movimiento inicial de una suite (el preludio) se llama “prepucio” (respuesta
real de un alumno mío de 3º de ESO), yo no podré dar como buena la
contestación, me tache María de tóxico, trasnochado o skin-head. Es decir, la
biografía, el contexto y el inconsciente de un alumno podrán decir lo que
quieran, para la sonata seguirá siendo sonata y la suite, suite. Lo del “discurso
diferente” ya es para nota. ¿Cómo, un alumno ignorante, un alumno sin
conocimientos, va ser creativo? Mucho mejor que yo lo explica Gregorio Luri: “pretender
dar respuestas distintas a problemas que no conocemos a lo que nos lleva no es
a ser creativos, sino a ser incontinentes verbales, que es muy distinto”. De
eso, de incontinencia verbal, ayer hubo mucho.
Esta claro que el sr Barajas tiene los "tics" estudiados para la promoción de su libro pero no invita a tener a un hijo en sus clases y de la Sra. Acaso mejor no hablar pues que se puede esperar de un "personajillo" que contrarresta a una afirmación del Sr.Royo sobre Unamuno que "cuando dijo eso".Es patetico ver en manos de quien estan nuestros hijos.Enhorabuena Sr. Royo,se ve que Ud. ama su profesión,
ResponderEliminarla de PROFESOR de toda la vida.Saludos.Miguel
Tiene los tics y las tics. Lo que sí puedo decir es que amo la música y estoy orgulloso de (intentar) enseñarla. Tampoco yo quiero que mis hijos estén en manos de según quién, Miguel.
EliminarMadre mía la cantidad de chorrada postestructuralista indigesta y mal entendida que atesora esta señora, madre mía...
ResponderEliminarIndigestión la mía, Jorge, todavía estoy en ello...
EliminarAlberto, estaba viendo el programita y pegando botes de la mala leche que me estaba entrando. Eres san Alberto, te lo juro. No me alargo más, porque ya lo he hecho en demasía en mi blog, y eso que me he dejado sin abordar un montón de las sandeces y despropósitos vistos y oídos.
ResponderEliminarAmigo Pablo, enseguida voy a leerte, gracias por tu comentario y por la solidaridad...
EliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarMe alegro mucho de haber encontrado este blog, gracias a un compañero que lo colgó en facebook. Tras ver el debate me entraron unas ganas enormes de poder contactar contigo y saber si era real todas esas cosas que decías, por lo que leo en tu post es así. Me gustaría enviarte este vídeo que es muy ilustrativo sobre la música y su aprendizaje. También me ha hecho reflexionar mucho sobre qué entendemos por música y lo que enseñas por música, el cual creo que es un paradigma de alta cultura europea, porque no creo que los Yekuana del amazonas se pongan a estudiar partituras.
EliminarTambién te animo a leer a una autora Margaert Mead, una antropóloga que lanzo la teoría de los paradigmas de cultura "postfigurativa" "cofigurativa" y prefigurativa"
Y por último, creo que estás confundido sobre Acaso, ella es profesora en la universidad pública!! en la Universidad Complutense de Madrid en el grado de Bellas Artes.
http://www.youtube.com/watch?v=3yRMbH36HRE&app=desktop
Estimada Eva: Agradezco mucho tu intervención. No creo haber tenido ningún alumno de los Yekuana del Amazonas. Buscaré información sobre la tal Mead, aunque reconozco (serán prejuicios) que no me suena bien lo del post-co-pre-figurativo. ¿Por qué dices que estoy confundido? Ya sabía que María era profesora de la Complutense. Quien tiene un negocio privado (aunque me acusara a mí de "defender mi negocio") era Sebastián. Un saludo y gracias por el enlace.
EliminarEnhorabuena Alberto, por tu blog. ¿Se pueden llamar revolucionarias unas ideas que llevan dando vueltas y "fracasando" durante casi un siglo? Nosotros los españolitos, siempre a la vanguardia, las conocimos con la LOGSE, pero estas ideas revolucionarias que nos presentan ahora como novedosas, estaban circulando por otros países desde inicios del siglo pasado. Lo del inconsciente en la educación queda muy misterioso y todo eso, pero el propio psicolanálisis carece de credibilidad entre muchos psicólogos. Sobre Margaret Mead, se puede visitar el magnífico blog de Eduardo Zugasti (La revolución naturalista) para hacernos una idea de su "progresismo". No he podido ver el archivo de TVE, pero por si sacaron a colación la archiconocida Finlandia, creo que el mejor diagnóstico sobre su situación lo hizo José Manual Lacasa en su "blog del IFIE": Finlandia era un país con resultados mediocres hace unos años, lo único que le ocurrió, es que no adoptó las teorías "progresistas y constructivistas" que otros países se apresuraron a abrazar y adorar. A partir de ahí, Finlandia se quedó como estaba y el resto de países empezaron a declinar sin parar, con el resultado que observamos actualmente: Finlandia supera en sus niveles educativos a todos los demás. No es que sea mejor, es que se quedó como estaba.
ResponderEliminarPor último, ¿sabrán estos "acosadores" de la memoria, que la están utilizando para argumentar que no sirve para nada? (Bonita paradoja).
Enhorabuena, de nuevo, Alberto.
Muy amable, "Anónimo". El blog de José Manuel Lacasa es de obligada visita. No salió Finlandia en el debate (raro) pero estoy muy de acuerdo en lo que comentas. Inger Enkvist lo ha explicado a la perfección. Un saludo
EliminarY lo malo es que vuelven a lo mismo, a las mismas monsergas, y no paran, los bárbaros, y tales canallas, que no han enseñado de verdad nada a nadie en su vida, se atreven a dar lecciones a troche y moche, con una verborrea y una suficiencia que lo único que provoca es hastío. Que una pedagoga se atreva a decir que "motiva" a sus alumnos de una clase de la Facultad bailando lo único que pone de manifiesto es el grado tan enorme y tan manifiesto de puerilidad a la que se puede llegar en una Facultad de pedagogía. Que un petardo presunto formador de emprendedores de las pelotas diga que sólo hay aprendizaje en la práctica sólo pone de manifiesto que cualquier economista formado en Cambridge le dará cien mil vueltas al más aventajado alumno que logre sacar este tipo de su escuelilla. Al fin y al cabo, la mejor contestación es la propia realidad. El concepto de "empresario" que manejan estos tipos es vomitivo y sólo produce chorizos, y el concepto de "alumno" que manejan los pedagogos no abandona nunca la más boba niñez, la falta total de autonomía: creatividad espontánea, pasión espontánea, lenguaje espontáneo. Primitividad mental.
ResponderEliminarImposible expesarlo mejor. Siempre he pensado que solo el ignorante rechaza el conocimiento y que solo el gandul desprecia el esfuerzo. Gracias por la visita y que no sea la última. Un saludo
EliminarNo se si me dejaréis publicar esta opinión. Al menos deberíais "por alusiones". Solo me remito a una entrada en un blog, donde se expone una parte limitada pero importante de mi argumentación, y os emplazo a que podamos debatir con calma, con argumentos y sobre evidencias empíricas, sin descalificaciones previas. Una tertulia de 20 minutos es un tiempo y un formato muy limitado para exponer nada de forma rigurosa. Mi argumentación es fruto de un proceso de reflexión y de una experiencia en formación empresarial de mas de 20 años, por lo que descalificarla de entrada, por que tenga formación de economista y me dedique al mundo empresarial, tiene forma de "prejuicio".
ResponderEliminarMe gustaría conocer vuestra contra argumentación a las cuatro creencias que propongo en la entrada en este blog del País y comprobar que grado de "evidencia" proveéis o si simplemente son creencias basadas en la tradición y en la ideología.
Si los profesores defendéis el sistema educativo en su actual formato por que que preparáis a los alumnos para tener una capacidad "critica" , ¿como es que me negáis el derecho a opinar sobre educación por no ser profesor? He sido alumno de un colegio, de una universidad y de una escuela de negocios, padre de alumnos de colegio y de universidad, he estado en la junta del AMPA del colegio de mis hijos durante 8 años y a mi edad tengo una cierta experiencia de la vida. Me parece muy poco sensato el negar el derecho a opinar y simplemente descalificar a los que opinan de forma diferente! Solo os pido que me deis argumentos, sólidos, en contra de mis tesis. Yo estoy dispuesto a escuchar y ver si la evidencia empírica de los resultados da la razón a una tesis o a otra.
http://blogs.elpais.com/ayuda-al-estudiante/2013/11/reinventemos-nuestra-educacion-porque-se-basa-en-creencias-erroneas.html
Buenas tardes, Sebastián. No tengo tiempo de contestarte ahora mismo. Si puedo, mañana, con calma, leeré de nuevo tu comentario y el enlace que facilitas en tu mensaje y te responderé. Simplemente quiero aclarar que nadie te niega el derecho a opinar (comprobarás que este blog es libre y sin moderación y tu comentario ha quedado publicado en cuanto has terminado de escribirlo), pero tú no estás opinando sino marcando las directrices a los profesionales (los docentes) en relación con una profesión que desconoces por no haberla ejercido. También yo he sido unas cuantas veces (no muchas, gracias a Dios) paciente y no se me ocurre aconsejar sobre la práctica médica. En cualquier caso, bienvenido a este cuaderno virtual que tienes abierto para cuando quieras. Un saludo
EliminarEstimado señor Barajas:
ResponderEliminarSi sus propuestas del programa de La 2 me produjeron estupor, su comentario de más arriba lo refuerza. Manifiesta usted que le parece poco sensato descalificar a los que piensan diferente, pero, en cambio, se pasó todo el programa descalificando lo que se hace en la escuela, con unos argumentos y unas bases de completa ignorancia sobre el tema y un desprecio que hace pensar que tiene usted algún resentimiento contra la educación. Reclama usted el derecho a opinar, y lo tiene, pero hasta ese derecho a opinar se puede ejercer con sensatez o, como fue su caso, disparatadamente. Por lo demás, usted no estaba allí en calidad de opinador, sino de experto, condición que, por supuesto, no tiene, porque para ser experto en educación no basta con haber sido estudiante y miembro de un APA. He puesto el vídeo, al azar, en el minuto 14 y lo he quitado en el 23. Le voy a dar una exposición de las enormidades que se permite en solo esos nueve minutos el colosal "experto en educación" que es usted:
-Dice usted: "Hay que formar académicamente es una opinión". Pues esa opinión lleva manteniéndose desde hace siglos en todos los países y ha servido para que el ser humano progresase y se hiciese mejor y más sabio, así que tal vez sea usted el que está equivocado con su patente desprecio.
-Dice usted: "Formar académicamente es perder el tiempo". Valga lo anterior más esto otro: ¿No le parece que es usted un poco prepotente en sus descalificaciones? Exabruptos como ese le desautorizan a usted por completo.
-Dice usted: "Los alumnos que van a la escuela y a la educación secundaria y a la universidad van porque quieren encontrar un puesto de trabajo". En lo referido a la escuela y a la secundaria, como es de sentido común y le garantizo yo, que conozco a miles de alumnos de esas edades (¿a cuántos conoce usted?), esa afirmación basta para demostrar que usted no tiene ni idea de lo que dice.
-Dice usted: "La escuela mata la motivación". ¿Y usted cómo lo sabe? ¿Por su condición de "experto" o porque la conoce por dentro? Yo la conozco muy bien y le garantizo que en la escuela hay motivación y muchos procedimientos para conseguirla. Mucho me temo que usted empieza por no saber ni lo que es de verdad la motivación, ¿o a lo mejor se cree que consiste en comer y bailar en clase, como dice su amiga María Acaso? Va a ser eso.
-Dice Alberto Royo: "Un profesor que sepa". Le espeta usted: "Que sepa de qué". Ese estilo recuerda más a la taberna que al debate sensato.
-Le dice usted a Alberto Royo: "Tú piensas que el profesor tiene que ser un repositorio de información". Sonoro pero hueco, típico cliché pedagogista. Y, por supuesto, un profesor tiene que saber y estar bien informado, claro que a lo mejor usted prefiere y propone profesores analfabetos.
-Dice usted: "¿Qué más da lo que diga Unamuno?". Nueva incursión en el estilo tabernario. Está claro que usted desprecia la cultura. Usted no entiende nada, pero ahí está, pontificando, y con prepotencia. ¡Qué gran verdad es aquello de que la ignorancia es atrevida! No quiero ni imaginarme lo que sería un sistema educativo diseñado por usted; tendría una pobreza y una falta de horizontes humanos escalofriante.
Continúo el comentario anterior.
ResponderEliminar-Se atreve usted a decirle a Alberto: "Tú defiendes tu negocio", con el desvergonzado cinismo de atribuirle a él las intenciones ocultas (malamente) que tiene usted, que empezó el debate enseñando su librito y poco después de decir esto se explaya en una exposición propagandística acerca de lo que hace en su negocio educativo privado (porque usted tiene un negocio educativo privado, ¿no?).
-Dice usted: "La escuela tradicional no tiene el sentido de competencia, de sé hacer". Lo tiene. Es usted, como ya se ha visto repetidamente, el que no tiene ni idea de lo que es la escuela, pero sí la osadía de echar pestes de lo que desconoce.
-Le atribuye usted a la escuela este patrón: "O tienes un ocho y eres muy bueno o tienes un cuatro y eres tonto, chico". Tráigame un solo colegio o instituto público que se conduzca así o tendré que pensar que es usted un bocazas.
-Dice usted que las cosas que se aprenden en la escuela no son aplicables. En el sentido romo de lo aplicable que tiene usted, no lo tiene. Pero es que usted no ha entendido lo que es la escuela ni me temo que sepa diferenciar entre aplicaciones inmediatas y aplicaciones a largo plazo o para toda la vida.
-Finaliza usted haciendo gala de su estilo caótico con una absurda explicación sobre bodegueros y créditos destinada a la propaganda de su negocio y que quiere hacer extensiva a la escuela para descalificarla, demostrando, una vez más que desconoce la escuela, la cual no se rige ni puede regirse por los patrones de un máster de formación profesional.
Señor Barajas: dedíquese a su librito y a sus negocios y deje en paz a la escuela. Es un elemento muy importante en la vida de la sociedad y no se merece que vengan a zarandearla de forma grosera ignorantes que saben mucho menos de lo que se creen. Haga un esfuerzo por respetar a los demás. Alberto, disculpa la extensión de este comentario, pero es que he querido señalarle al señor Barajas algunas cosas que me parecían oportunas.
Nada que disculpar, Pablo. Este espacio está abierto para todo aquel que quiera opinar.
ResponderEliminarEstimado Sr Guachimán,
ResponderEliminarleo sus comentarios y veo que sigue argumentando con descalificaciones y prejuicios pero no aporta ninguna evidencia que pueda refutar mis tesis. Llevo mas de 25 años trabajando en temas, entre otros, de formación profesional en empresas, y en proyectos de gestión del cambio. He estudiado en profundidad los mecanismos del aprendizaje me he tomado la molestia de escribir 250 páginas en un libro para exponer, de forma razonada, mis tesis sobre los problemas que veo en la educación, desde una doble óptica, la del proceso de producción (clase, asignatura, estudio (empollar) y examen) y la del contenido, ¿por qué estudiamos lo que estudiamos?, ¿que evidencia tenemos para defender que el curriculum actual es el mejor que podemos tener?. Si he hecho esto es por que me parece que la educación es un tema muy importante y me lo tomo muy en serio. El formato de tertulia y el corto tiempo de que dispusimos hicieron muy difícil el poder contextualizar mis argumentos, por ello les invitaba a leer un resumen de ellos en el post que adjunto al final del texto. Si hemos de mejorar la educación, por que hay que mejorarla, solo lo podremos hacer desde un análisis riguroso y no defendiendo las “creencias” que sostienen un modelo muy ineficaz. Me encantará conocer sus contra argumentos a mis tesis, si tiene la amabilidad de presentarlos.
http://blogs.elpais.com/ayuda-al-estudiante/2013/11/reinventemos-nuestra-educacion-porque-se-basa-en-creencias-erroneas.html
Señor Barajas:
ResponderEliminarSe dedica usted a escurrir el bulto, le explicaré por qué lo digo:
1.- Me dice que argumento con descalificaciones, cosa que no es cierta: lo que hago es sacar aquí sus palabras textuales en el vídeo, que eran descalificaciones tan insostenibles que, al final, con un efecto boomerang, le han convertido a usted en el descalificador autodescalificado. Luego, me limito a hacer una breve glosa de cada una para que se entienda mejor por qué le descalifican. Lo mismo hago en un artículo de mi blog (que me parece que ha leído) con algunas otras de las barbaridades que dijo usted.
2.- Ni aquí ni en mi blog invento nada de lo dicho por usted: usted ha dicho esas cosas, sería usted quien debería explicar cómo se permite tales despropósitos.
3.- Le recuerdo que esta serie de artículos viene motivada por el programa de La 2, así que es muy lícito que sometamos a juicio lo que usted dijo allí. Su constante alusión a la escasa duración del programa y al formato de debate es una pobre excusa. También para Alberto Royo era un debate de 20 minutos y los aprovechó para decir cosas sensatas, y no las sonrojantes cosas que dijo usted y que le cito más arriba y en mi blog. Me temo que es esa la razón por la que usted está intentando desviar la atención hacia otros focos.
4.- Así pues, no voy a molestarme en leer nada de lo que usted dice: ya se ha descalificado usted bastante con lo que era el objeto y punto de partida de este artículo: el programa de La 2. Sus palabras y su actitud ahí me hacen pensar que no tiene usted nada interesante que aportar. Coincido con usted en que hay mucho que mejorar hoy en la educación española, pero las cosas más importantes tienen que ver con el actual sistema y son precisamente cosas con las que creo que usted estaría muy de acuerdo, dado el desprecio que ha demostrado hacia cosas tan importantes como el estudio (fíjese en ese significativo "(empollar)" que incluye en su comentario), la memoria, el esfuerzo, el conocimiento abstracto, la cultura, la escuela (que injuria) y sus métodos (que, en realidad, desconoce). Su visión de la enseñanza es alicorta y empobrecedora: supone que la enseñanza debe ser activa y práctica y nada más y se carga de un despectivo y grosero plumazo todo lo que salga de ahí. Nosotros, en la escuela, defendemos que el formar a un ser humano incluye eso (y lo contemplamos) y muchas otras cosas que cuidamos también, aunque a usted le parezcan pérdidas de tiempo. Aspiramos a más, porque formamos a RICOS y COMPLEJOS seres humanos, no nos limitamos a preparar para el trabajo y la creación de empresas.
5.- Revise el vídeo tratando de ser objetivo y vea si tengo o no razón. Puede que saque usted alguna lección, como la de que no se puede entrar a tratar un tema con ligereza, desconocimiento y falta de respeto. En esas tres cosas hacia la escuela se prodigaron el reportaje del principio, la señora Acaso y usted. No es que usted sea muy listo y los demás seamos idiotas. El mundo no es tan simple.
Sr Gauchiman,
ResponderEliminarno quiero ni pensar en el tipo de seres humanos que usted "forma" en sus clases, ante la incapacidad manifiesta que tiene para el dialogo. Por mas que insista, lo suyo son simples opiniones y nada mas. No me retracto en nada de lo que dije, es mas, cada vez que leo sus opiniones me reafirmo en que jamas llevaria a mis hijos a un colegio en el que usted fuera un profesor, del mismo modo que usted no llevaría a los suyos a uno en el que se practicasen los metodos que yo propongo. Gracias a Dios estamos en un país libre y, tarde o temprano, conseguiremos que haya una alternativa a profesores como usted, y las personas podrán escoger lo que mas les convenga. Quizas algunos se decaten por ser ricos y complejos, en manos de dogmáticos como usted! Sus opiniones son una gota de agua en un oceano, con muy poca influencia, por la falta de consistencia en su argumentación.
Gracias por sus insultos, señor Barajas. Persiste en autodescalificarse. Me permito señalarle que usted no sabe cómo soy yo dando clase: su vieja costumbre de condenar lo que desconoce. Quiero, de todos modos, reconocerle a usted un detalle positivo: ha tenido la entereza de venir al blog de Alberto a dar la cara. No todos lo harían; sin ir más lejos, ¿dónde está María Acaso? ¿Dando alguna clase superinnovadora mientras baila una cumbia y se zampa un solomillo? No creo que entre usted y yo sea necesario cruzar una palabra más.
ResponderEliminarMaría Acaso creo que está en Noruega impartiendo una "clase magistral" sobre la Redevolution (no es broma). Quizás a su regreso se pase por aquí para intervenir en este intercambio de...lo que sea. Voy a hacer algunas matizaciones. En primer lugar, Sebastián, decir que Pablo es "incapaz para el diálogo" no puede estar basado en ninguna "evidencia empírica". Basta ver el carrete que tiene el tío y la extensión de sus entradas (una extensión que no le impide argumentar de forma más que precisa). Es habitual que, cuando uno no acepta comulgar con ruedas de molino, sea tachado de poco dialogante, pero no es así de ninguna manera. La de Pablo es, en efecto, como la mía, "una opinión y nada más". También lo es la suya. La diferencia radica en que usted es economista y nosotros profesores. Yo no sería tan osado de publicar un libro sobre la prima de riesgo o el sistema financiero ni de darle a usted lecciones sobre economía. Que usted sea tan aventurado es respetable, puede ser hasta admirable, pero no pretenda que le demos la razón.
ResponderEliminarSr Guachiman, (y Sr Royo),
ResponderEliminarVeo con claridad que utilizamos las mismas palabras con sentidos muy diferentes, cosas del lenguaje, cuando usted dice, y cito literalmente de su texto: “desvergonzado cinismo”, “Es usted, como ya se ha visto repetidamente, el que no tiene ni idea de lo que es la escuela”, “En el sentido romo de lo aplicable que tiene usted”, “Finaliza usted haciendo gala de su estilo caótico con una absurda explicación”, “que vengan a zarandearla de forma grosera ignorantes que saben mucho menos de lo que se creen”… no lo considera descalificaciones! Pobres de sus alumnos si las alabanzas que usted les proporciona son de este estilo!
“No creo que entre usted y yo sea necesario cruzar una palabra más”. Buen final! Ya veo que su capacidad para aguantar la presión es muy baja, quizás con niños en la escuela se atreve mas, pero con adultos se le acaba la cuerda bien pronto, el siguiente paso ya sería el insulto directo!. No me lea, no me importa, no he escrito el libro para usted, ya me conozco a los suyos, les escucho, les leo, y analizo como piensan y actúan, me interesa mucho ver y analizar el fenómeno del “profesor dogmático”, una reliquia de la romántica y falsa idea de “ilustración”. Pero yo no voy a parar, me importa mucho el tema educativo, como ciudadano, padre de familia y empresario, y voy a seguir para desarrollar una alternativa a su modelo obsoleto y perjudicial. Y le digo “una alternativa”, para aquellos que quieran elegir, supongo que habrá algunos que seguirán queriendo ir a sus escuelas, pero muchos otros no. No me importa lo que ustedes hagan, solo me preocupa crear una alternativa. Y todos tan felices y cada uno a su negocio, que ustedes también tienen un negocio que preservar……
Resultado del debate: Profesor Dogmático 0 – Profesional innovador 1.
“Ignorante” es aquel que no tiene noticia de algo, que lo desconoce, es decir, un desinformado. Usted es eso sin la más mínima duda, sin entrar ya en si es o no una persona culta porque no viene al caso. Sigue usted desbarrando (vuelvo al “usted” porque veo que lo prefiere) e insistiendo en que tenemos un negocio que preservar. Sr Barajas: accedí a la función pública por oposición libre y no tengo ningún negocio que preservar. Usted sí necesita vender su libro y su empresa privada. Lo mío se llama servicio público. En fin, no parece que la cosa dé para más. Enhorabuena por su "victoria" en este debate, “Profesional Innvador”.
ResponderEliminarSr. Barajas:
ResponderEliminarNo siga poniéndose en evidencia o acabará rompiendo los moldes de lo patético, y a ver qué deja para los demás ases del pedagogismo. Tiene razón en su comienzo: las palabras que le dedico son muy duras. Al hablar de usted en mi blog, empiezo disculpándome por los términos tan duros que voy a emplear y a continuación explico los motivos: son la respuesta a sus tergiversaciones, mentiras y ofensas. Así pues, no se trata de descalificaciones, sino de poner en su sitio (con explicación previa o posterior de por qué) las múltiples intemperancias sobre la escuela que usted se permitió ante miles de espectadores. Un ejemplo. En uno de los comentarios de este blog, le digo a usted:
"Le atribuye usted a la escuela este patrón: "O tienes un ocho y eres muy bueno o tienes un cuatro y eres tonto, chico". Tráigame un solo colegio o instituto público que se conduzca así o tendré que pensar que es usted un bocazas."
Lo ve con claridad, ¿verdad? Es usted quien empieza con un aberrante, ignorante e insultante reduccionismo contra la escuela. A continuación, yo le digo que lo sustente con hechos o habré de pensar que es un bocazas. ¿Ha demostrado usted algo? Entonces no puede quejarse de que yo le llame bocazas, es usted el que se comporta como tal. Y así toda su intervención televisiva, con la que me imagino que usted embaucaría a unos cuantos miles de incautos. ¿Pediría usted a La 2 que pasasen ante el público el repaso que le estamos dando aquí y los charcos en que se está metiendo usted solito? Ya me imagino que no: aquí, entre pitos y flautas, está saliendo el verdadero Sebastián Barajas, un señor bastante menos rutilante, con unas propuestas bastante menos aparentes. Por otra parte, si supiera usted las presiones que he aguantado en la vida, se cagaría por los pantalones abajo (con perdón de la expresión), no se monte películas: es usted el que está desarbolado, no trate de aparentar que me veo presionado por usted, que no cuela. ¿Qué decir de su alusión al insulto directo, cuando lleva dos comentarios seguidos insultándome con un estilo muy poco digno de su terno y su corbata? Lo que sí me destroza, en cambio, es que usted no haya escrito su libro para mí: en cuanto acabe de escribir esto, corro a tirarme por un barranco. Muy significativa me parece, sin embargo, la generalización contra esos demonios particulares en que usted se extiende al final: los "míos", esos profesores dogmáticos, románticos, etc. contra los que parece tener montada una cruzada. Desde el principio me pareció que usted era un resentido contra la escuela, ¿qué le pasó, que le suspendió la de Historia en 2º de BUP y no ha podido superarlo? Madure, hombre. Ya no digamos el final, eso del 0 - 1: ¿a un debate de ese nivel me quiere arrastrar? Oiga, tengo cosas importantes que hacer, no puedo ocuparme eternamente de sus monsergas y sus insultos, pero me voy a despedir dándole una satisfacción: ha ganado usted, he aquí el resultado:
GUACHIDOGMATICORROMÁNTICO, 0 - SEBASTIANINNOVADOR, 861
¡¡¡¡¡Alirón, alirón, Sebastián es campeóóóóóóóóón!!!!!
Hasta nunca, Sebastián.
Vaya, por no querer perder ni un minuto conmigo sus respuestas son realmente largas, aunque no muy elaboradas, también es verdad. Lo del resentimiento y la frustración que usted ve en mi, Freud lo describió muy bién como "el fenomeno de la proyección", que consiste en ver en los demas los problemas y defectos que reprimimos en nosotros mismos! Le pediria a la 2 y a cualquier cadena, debatir abiertamente, durante horas, con todos ustedes, por que sus argumentos no se sostienen, y si es tan verbalmente agresivo por la tele, se verá como es en realidad un profesor cuando se queda si argumentos y no tiene el poder de "suspender" cuando alguien discrepa de su "conocimiento".
ResponderEliminarY vino a hablar de su libro, claro que no llega a ser Francisco Umbral, desgraciadamente. Adelante, siga y siga vendiendo el libro y humo, que de picos de oro este país está lleno.
ResponderEliminarVaya vaya, pensaba que era el único en el mundo que discrepaba del sr Sebastián Barajas.
ResponderEliminarAquí algunos de los contra-argumentos que le di:
Lo decía por la afirmación del día de la presentación del libro de que hicieron experimentos de tener personas durante unos meses haciendo operaciones matemáticas y luego esto no se tradujo en una mejora del rendimiento. Esto NO demuestra nada. Hay muchos factores que pueden afectar. Quizás el tipo de ejercicios, tal vez el momento en que se hacían, etc.,
Tú vives de esto de la formación y tienes una necesidad de singularizarte. Cómo hacerlo? Pues rompiendo todo lo que hay y apareciendo como "salvador". Lo veo así. Honestamente, creo que tu discurso está mediatizado por el interés económico.
Te basas en la experiencia de tu hija y esto es nuevamente muy pobre y nada riguroso. La universidad ha cambiado mucho. Además de las clases magistrales, y las asignaturas de laboratorio, hay trabajos asíncronos que el alumno hace fuera del aula (te adjunto documento). Esto no es directriz de mi centro, sino de toda la UPC.
Por otra parte, hay que tener presente que los recursos económicos destinados a docencia son limitados, y no se pueden obviar los condicionamientos económicos. Ya te comenté que las antiguas escuelas técnicas siempre hemos tenido más sensibilidad para las clases de laboratorios y tanto en nuestro caso como en el de la salle, por ponerte un ejemplo cercano, encontrarás laboratorios muy bien dotados. Todo esto no lo verás en el campus nord. El motivo? Los equipos y los grupos de prácticas reducidos son muy caros!
Si leer es mejor que oir una clase magistral, te vuelvo a hacer la pregunta de la presentación: son mejores los ingenieros de la uoc que los de la UPC, UPF, UAB? Los estudios de empleabilidad de aqu no lo demuestran.
De ninguna manera es usted el único. Estoy seguro de que somos muchos más de los que parece. En cuanto a la motivación económica, cada vez la tengo más clara. Fíjese, sin embargo, que el Sr Barajas me acusaba a mí en aquel programa de querer "defender mi negocio" (¿¿qué negocio??). Gracias por su comentario y un saludo.
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